El fallo judicial da a los tribunales el control de decidir si esta cláusula es abusiva en cada caso o no, dando así la razón a los consumidores. Todas aquellas personas que lo deseen, podrán llevar su caso a los tribunales, donde deberán asegurarse que estas cláusulas tienen un carácter claro y comprensible. En caso contrario, pueden ser sustituidas por un índice legal aplicable de manera supletoria.
En definitiva, los jueces españoles decidirán en cada ocasión si la hipoteca es abusiva o no y, en caso de que esta se comercializara de forma poco clara y sin transparencia, los bancos deberán cambiar el IRPH por otro índice legal.