EL DELITO DE HOMICIDIO Y EL DELITO DE ASESINATO. CARACTERÍSTICAS Y DIFERENCIAS ENTRE AMBOS

 1 .-Alevosía 

 2.-Precio o recompensa. 

 3.-Ensañamiento, aumentando deliberada e inhumanamente el dolor del ofendido 

4.- Para facilitar la comisión de otro delito o para evitar que se descubra. 

 Para que muchos de ustedes lo entiendan mejor, el asesinato es el llamado homicidio en primer grado en los EEUU. Por tanto, cuando alguien mata a otra persona las penas que reciba pueden oscilar entre los 5 y los 30 años, un tremendo abanico en el que deberemos tener en cuenta muchas circunstancias. 

 No ofrecen dudas las circunstancias 2 y 4. Sin embargo, muchos de Ustedes se preguntarán qué es la alevosía y qué es el ensañamiento. 

 3.- Empecemos por el ensañamiento, que se considera como el aumento deliberado e inhumano del dolor de la víctima.

Se requieren dos requisitos:

UNO OBJETIVO: Constituido por la causación de males objetivamente innecesarios para alcanzar el resultado típico, que aumentan el dolor o el sufrimiento de la víctima.

OTRO SUBJETIVO: Que consiste en que el autor debe ejecutar, de modo consciente y deliberado, unos actos que ya no están dirigidos de modo directo a la consumación del delito, sino al aumento del sufrimiento de la víctima. 

Se ha considerado por la jurisprudencia como "un interno propósito de satisfacer los instintos de perversidad, provocando, con una conciencia y voluntad decidida, males innecesarios y más dolor a la víctima. El daño ha sido expresión de su propósito homicida que ejecuta de forma violenta e incontenida". 

 1.- La ALEVOSÍA reside en el hecho de que un sujeto garantice la ejecución de un delito contra otro sujeto asegurándose que no existirá riesgo para él. Sin embargo, no hay mejor manera de entender las cosas que ofreciendo un ejemplo de la vida misma. En este caso de mi vida profesional. 

 El pasado mes de octubre de 2018 tuve un juicio con jurado (ya les hablamos en anteriores post de qué tipo de delitos se enjuician en un Tribunal de Jurado) sobre un cliente del despacho imputado por un delito de asesinato, con las dobles agravantes de alevosía y premeditación. Desde luego la pena que le pedían era muy elevada. 

 Seguramente les sonará el caso por la prensa:  En junio del 2016 se produjo la muerte a manos de su pareja de una mujer de 40 años en Badalona.  La dirección letrada de la defensa del presunto asesino la llevo yo. Tanto el Ministerio Fiscal como la acusación popular de Badalona acusaban a mi cliente por un presunto delito de asesinato con alevosía y ensañamiento. Decían que le había asestado 47 puñaladas y que la mató mientras ella dormía en su habitación con tapones puestos en las orejas. Consideraban que mi cliente había planeado matar a su mujer, después de enterarse que le había sido infiel y que lo iba a dejar, convenciéndola para pasar el último fin de semana juntos en casa y sabiendo que ella dormía con tapones en los oídos aprovechó para matarla. Lógicamente nada de esto es cierto, pero para ejemplificar el caso está muy bien. Consideran que hay alevosía desde el momento en que él aprovecha que ella está en casa durmiendo y con tapones en los oídos y ensañamiento porque le clava aparentemente 47 puñaladas.